Cuando queremos los sentidos perdemos. Nos enamoramos y en el aire flotamos. Pero cuando el amor tenemos, nos acobarda el miedo a perderlo. Amamos, sentimos, perdemos y lloramos cuanto  nos ha dejado.

Bonita y calida tarde que brillas en la oscuridad, aunque tu cielo te nuble no dejas de brillar.

Cuando dejas de perseguir un imposible llega la invencible.

El corazón de una madre Todo aquello que creemos necesario es lo que a nuestros hijos damos, difundimos principios y valores que a nosotros nos enseñaron. No significa que por ello su apacidad anulemos; les tenemos que mostrar lo que en su vida necesitarán. El corazón de una madre transciende barreras, opiniones y entresijos, todo es por amor a nuestro hijo.